LOS PATRIARCAS BÍBLICOS por José Alvarez López

CARÁCTER MITOLÓGICO DE LOS PATRIARCAS BÍBLICOS
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por José Alvarez López


Todo va orillando la posibilidad de que los Patriarcas bíblicos no sean entidades reales, es decir, no hayan sido seres de carne y hueso. Salvo Abraham, que tiene alguna realidad histórica, del resto de los Patriarcas no podemos decir mucho, tanto como si no hubieran existido. Y esta posibilidad se ve refrendada por las recientes investigaciones arqueológicas en el reino de Mari.

Este reino antiquísimo, que hacia finales del siglo XXX a. C. Se extendía a ambos márgenes del Éufrates, estaba constituido por numerosas ciudades cuyos nombres fueron reconocidos poco a poco por los arqueólogos, a través del descubrimiento de numerosas tabletas cuneiformes. Estas investigaciones depararon la sorpresa de que todos nos nombres de las ciudades reconocidas por la arqueología correspondían a los nombres de los Patriarcas postdiluvianos del Génesis.

En un principio se pensó que estos nombres refrendaban la real existencia de los patriarcas postdiluvianos, pero cuando quedó claramente establecido que eran los nombres de las ciudades del reino de Mari, se incrementó la cuota de duda en torno a la realidad histórica de los Patriarcas. En términos concretos, todos los nombres de Patriarcas que aparecen en el Cap. XI del Génesis... Selag, Peleg, Nachor, Terug, Harán, etc., son también nombres de ciudades hoy bien conocidas por la arqueología.

Esta importante circunstancia arqueológica nos permite tener una idea de la fecha de redacción de esta parte del Génesis, pues las ciudades del reino de Mari corresponden al siglo XXX a. C.

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